12/11/08

Érase una vez en México



En esta ocasión quiero compartirles la experiencia que tuve hace poco al ir a la oficina de correos mas cercana a mi domicilio.

Para empezar, me imagino que ya se habrán dado cuenta que Correos de México (o Servicios Postales Mexicanos, SEPOMEX) entró en una reestructuración, y ha cambiado por lo menos su logo.



Asi que ahora verán a su cartero en este uniforme con los colores rosa mexicano y verde chillón.

La noticia de la reestructuración de SEPOMEX es buena, ya que el servicio que ofrece en general toda la población lo percibimos como malo, tardado y desconfiable.



Los paquetes no llegan, o si llegan a veces llegan abiertos y bueno, ahora que la tecnología nos permite utilizar el correo electronico o las llamadas por telefono, podría decirse que el correo postal ha quedado obsoleto.



Bueno, pero todo esto me lleva a mi anécdota, ya que esta semana fui a dejar varias cartas con distintos destinos en todo el mundo.

Las tarifas estan divididas por zonas, asi que los envios nacionales tienen un costo, a toda Norteamérica y el caribe tiene otro costo, Sudamérica y Europa corresponden a otra tarifa y el résto del mundo (Asia, Africa y Oceanía) es la última categoría.



En fin, estaba yo organizando lo que me disponía a enviar dividiendolos en las diferentes zonas, cuando la encargada de la oficina postal, comienza a darme las tarifas. En las nacionales y que iban a Estados Unidos no hubo mayor problema.

Pero cuando comenzó a ver los países a donde iban las demás... para empezar, yo ya llevaba mas o menos calculado el costo total, de acuerdo a las tarifas publicadas en su sitio de internet.

Y para empezar, el total de las estampillas era mucho más lo que me llamo la atencion y me puse a comparar los precios publicados en la ventanilla. ¡Ah! Pues resulta que la encargada, no sabía a que zona pertenecía los países a los que estaban dirigidas las cartas y pues las puso como resto del mundo (nada perdida, pues aparte es la tarifa más cara).

Pues comenzé a explicarle que la mayor parte de las cartas iban a Europa y Sudamérica, que pertenecían a una tarifa menor. Pues como que no me creyó y le hablo a otra persona que trabaja ahi en la oficina postal, pero esa mujer tampoco pudo dar fe y legalidad de que paises como la República Checa, España pertenecieran a esta tarifa.

Total, que le hablaron a un cartero, para que él diera su opinion. Afortunadamente las cartas ya estan en camino a su destino (o por lo menos eso espero). Pero si me dio risa (o pena) el que las personas que estan trabajando en las oficinas de correos, no se sientan seguros a la hora de decir qué país está en qué continente.

Y de ser así, pues ojalá por lo menos les dieran un mapa mundi o una lista para delimitar las tarifas.

En fin... son de las cosas que cres que sólo ocurren en México.


Guadalajara, tierra del tequila, mariachi, tortas ahogadas y las chivas rayadas.